Algunos días, cuando uno termina de entrenar, y en la soledad de un entrenador, cuando esta en casa preparando los entrenamientos, preparando las convocatorias y los partidos, pensando que hacer para no lastimar a ningún niño, piensas: "Todo esto merece la pena"
Pues sí, merece. Ayer recibí una llamada telefónica, de un niño de 10 años, lleno de alegría porque un equipo, el Real Jaén, lo había elegido para jugar esta temporada en la categoría Preferente Alevin, un niño que la pasada temporada estaba en el Alevin C de la PDJ, y eso me llena de orgullo, porque algo haremos bien. Verdad es que yo animé a sus padres para que fuese a la convocatoria, porque creo, que él y otros están capacitados para jugar en la categoría preferente . Pero el motivo que verdaderamente me hace feliz, es escuchar a su madre decirme que cuando le comunicaron la noticia, a la primera persona que llamó fue a mí, para decírmelo.
Escuchar su voz, llena de alegría, fue lo que verdaderamente me hace pensar que merece la pena entrenar con niños.
Yo siempre digo a todos los niños, hay que trabajar, y no pensar en que categoría estoy hoy, porque el futbol es justo e injusto algunas veces. Y todo va en la progresión individual. Pero sobre todo en estar en un equipo en el que juegues. JUGAR, es lo importante.
En este principio de temporada, ya me he llevado dos alegrías, una por este alevín, y otra por un infantil, que también el año pasado estaba en segunda provincial y esta temporada va a jugar nada mas y nada menos que en Categoría Andaluza. El mérito, es de ellos, que hacen de su deporte preferido una pasión. Los entrenadores debemos dejar nuestro ego aparcado, porque estamos para enseñar, ayudar a los niños a conseguir sus metas. Las nuestras las conseguimos a diario, con el trabajo de cada dia.
"LOS SUEÑOS, CON TRABAJO E ILUSION, ALGUNAS VECES SE HACEN REALIDAD"
Felicidades. Un saludo. Jose Luis
